La reputación corporativa de una empresa es una de las bases fundamentales para consolidarte como una marca importante y relevante en el panorama actual. “Para intentar lograr y consolidar sus valores intangibles las organizaciones tienen que gestionar su identidad corporativa […] la Comunicación Corporativa juega un papel social clave y plenamente estratégico”. La reputación funciona en dos vertientes, la que tu das y en la que el mundo te ve. Si entendemos la cultura pop como un lugar donde las cosas nacen y viven en un mismo día y la “performance” es la forma de vida de medio mundo, entendemos que ser tendencia, influir y crear marca es algo muy complicado.
El mundo Kardashian es un lugar donde nada muere, sino que resurge de sus cenizas y aún más fuerte y más grande. Nos centramos en nuestra protagonista Kim Kardashian, conocida por ser amiga de Paris Hilton y por sus salidas nocturnas. En 2007, descubrió que su película porno casera con Ray J, novio de la época, había sido expuesta por de Vivid Entertaiment bajo el nombre “Kim K Superstar”. Kim demandó a la compañía y llegaron a un acuerdo de 5 millones de dólares a su favor. A esas alturas, la reputación de Kim Kardashian estaba por los suelos, pero, para bien o para mal, estaba en los focos de Hollywood. Aquí, es donde entra la Comunicación Corporativa y la opción de convertir este problema en una estrategia comunicativa, en crear una marca, algo que Kris Jenner, su madre, lo entendió a la perfección. Decidió lanzar un telerreality de la familia titulado “Keeping Up With the Kardashians” donde aparece Kim con sus hermanas Khloe, Kourtney, Kendall y Kylie y su madre y padrastro Bruce Jenner (ahora Caitlyn).
Kris Jenner consiguió hacer que Kim se hiciera más grande; en una celebrity mundialmente conocida y que ha cambiado el panorama social y la forma de ver el mundo. Ha roto con estigmas y ha destrozado y sigue destrozando los cánones de belleza impuestos por el patriarcado actual. Dentro de un sistema donde la extrema delgadez es “lo que se lleva”, lo que se ve en las pasarelas y lo que inculcan en la gran mayoría de las mujeres de occidente, ella, siendo una de las personas más influyentes del mundo se opera las caderas para tener un cuerpo con curvas. Ha fotografiado su cuerpo desnudo y lo ha expuesto en instagram, mientras todas las celebrities le hacían un slut-shaming increíble.
No solo eso, las Kardashians han conseguido que la transexualidad esté en boca de todos los Talks Shows estadounidenses, en los periódicos y hasta debajo de las piedras. Su padrastro es la protagonista en los capítulos “About Bruce, 1 y 2” de la temporada 10 del reality, donde cuenta su realidad y el paso que va a dar al declararse una mujer transexual. Ahora Caitlyn cuenta con un apoyo por parte de todas sus hijas; la quieren y desean toda la felicidad del mundo. Una situación con la que conviven miles de personas en el mundo, llevando a prime time la visibilización de la identidad de género y la identidad sexual.
El grano de arena que cualquier celebrity puede poner en el mundo del feminismo, no es que sea más grande, sino que reluce mucho más
Muchas personas pueden decir que no se puede concebir el “clan Kardashian” como ningún motivo de ejemplo a seguir, ni de perspectiva ninguna dentro del feminismo. No es eso lo que se intenta explicar aquí, sino que, en un mundo de focos, algunas personas han sabido poner el foco en lo importante: luchar por la igualdad. El grano de arena que cualquier celebrity puede poner en el mundo del feminismo, no es que sea más grande, sino que reluce mucho más. ¿Por qué? Porque hace replantearse cosas a los que antes no lo hacían, el culto al cuerpo con curvas, el quererse a sí mismas y la sororidad entre hermanas pase lo que pase.
Han hecho de sus problemas la solución para su éxito y este le ha mantenido en lo más alto y, sin que se quede en el aire, siendo un programa de mujeres, dirigido por mujeres. Hay quien dice que no hacen nada, son famosas por ser famosas, pero han conseguido llegar muy alto con esa fama, con una estrategia que no todos son capaces de llevar a cabo. Están presentes en el mundo de los cosméticos, la moda y en las redes sociales como si hubieran nacido para ello, llevando a cabo un cambio en el mundo. Las Kardashians han llevado a la palestra nuevas perspectivas, nuevas visiones y voces diferentes de mujeres que lideran, aunque sea durante un momento, nuestro pensamiento.